[Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
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Megu Sagara
alex_orochi
kaizoku ou
7 participantes
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[Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Autor: kaizoku ou
Pareja: LuffyxNami
Advertencias: ZoroxRobin, SanjixVivi, UsoppxKaya.
Rate: ATP, aunque hay un que otro capítulo Lemon, pero está indicado en cada uno.
Género: Romance, humor, familia.
Publicado tambien en: Fanfiction.net
Cantidad de capítulos: 44
Estado: En proceso
Resumen: Luffy y Nami tienen una pequeña niña. Narración sobre las aventuras de esta Princesa Pirata y cómo es que va creciendo.
¡Mi nombre es Lina-chan!
Lista de capítulos:
Capítulo 1: Leer ahora
Capítulo 2: Leer ahora
Capítulo 3: Leer ahora
Capítulo 4: Leer ahora
Capítulo 5: Leer ahora
Capítulo 6: Leer ahora
Capítulo 7: Leer ahora
Capítulo 8: Leer ahora
Capítulo 9: Leer ahora
Capítulo 10: Leer ahora
Capítulo 11: Leer ahora
Capítulo 12: Leer ahora
Capítulo 13: Leer ahora
Capítulo 14: Leer ahora
Capítulo 15: Leer ahora
Capítulo 16: Leer ahora
Capítulo 17: Leer ahora
Capítulo 18: Leer ahora
Capítulo 19: Leer ahora
Capítulo 20: Leer ahora
Capítulo 21: Leer ahora
Capítulo 22: Leer ahora
Capítulo 23: Leer ahora
Capítulo 24: Leer ahora
Capítulo 25: Leer ahora
Capítulo 26: Leer ahora
Capítulo 27: Leer ahora
Capítulo 28: Leer ahora
Capítulo 29: Leer ahora
Capítulo 30: Leer ahora
Capítulo 31: Leer ahora
Capítulo 32: Leer ahora
Capítulo 33: Leer ahora
Capítulo 34: Leer ahora
Capítulo 35: Leer ahora
Capítulo 36: Leer ahora
Capítulo 37: Leer ahora
Capítulo 38: Leer ahora
Capítulo 39: Leer ahora
Capítulo 40: Leer ahora
Capítulo 41: Leer ahora
Capítulo 42: Leer ahora
Capítulo 43: Leer ahora
Capítulo 44: Leer ahora
Capítulo 45: Leer ahora
Capítulo 46: Leer ahora
Pareja: LuffyxNami
Advertencias: ZoroxRobin, SanjixVivi, UsoppxKaya.
Rate: ATP, aunque hay un que otro capítulo Lemon, pero está indicado en cada uno.
Género: Romance, humor, familia.
Publicado tambien en: Fanfiction.net
Cantidad de capítulos: 44
Estado: En proceso
Resumen: Luffy y Nami tienen una pequeña niña. Narración sobre las aventuras de esta Princesa Pirata y cómo es que va creciendo.
¡Mi nombre es Lina-chan!
Lista de capítulos:
Capítulo 1: Leer ahora
Capítulo 2: Leer ahora
Capítulo 3: Leer ahora
Capítulo 4: Leer ahora
Capítulo 5: Leer ahora
Capítulo 6: Leer ahora
Capítulo 7: Leer ahora
Capítulo 8: Leer ahora
Capítulo 9: Leer ahora
Capítulo 10: Leer ahora
Capítulo 11: Leer ahora
Capítulo 12: Leer ahora
Capítulo 13: Leer ahora
Capítulo 14: Leer ahora
Capítulo 15: Leer ahora
Capítulo 16: Leer ahora
Capítulo 17: Leer ahora
Capítulo 18: Leer ahora
Capítulo 19: Leer ahora
Capítulo 20: Leer ahora
Capítulo 21: Leer ahora
Capítulo 22: Leer ahora
Capítulo 23: Leer ahora
Capítulo 24: Leer ahora
Capítulo 25: Leer ahora
Capítulo 26: Leer ahora
Capítulo 27: Leer ahora
Capítulo 28: Leer ahora
Capítulo 29: Leer ahora
Capítulo 30: Leer ahora
Capítulo 31: Leer ahora
Capítulo 32: Leer ahora
Capítulo 33: Leer ahora
Capítulo 34: Leer ahora
Capítulo 35: Leer ahora
Capítulo 36: Leer ahora
Capítulo 37: Leer ahora
Capítulo 38: Leer ahora
Capítulo 39: Leer ahora
Capítulo 40: Leer ahora
Capítulo 41: Leer ahora
Capítulo 42: Leer ahora
Capítulo 43: Leer ahora
Capítulo 44: Leer ahora
Capítulo 45: Leer ahora
Capítulo 46: Leer ahora
Última edición por kaizoku ou el Lun Ene 16, 2012 8:07 am, editado 3 veces
kaizoku ou-
Mensajes : 179
Fecha de inscripción : 07/03/2011
Edad : 40
Localización : En un dojo, puliendo mi Kyokugen karate
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Capítulo 43:
- Spoiler:
- Las estrellas ya titilaban rompiendo la total oscuridad de la noche, aunque no era tan tarde. Aun así, el Rey Pirata se había ido a acostar temprano debido al disgusto que le había causado la vestimenta de su “niña”. Su mujer estaba con él, y se encontraba algo desconcertada al conocer finalmente el lado celoso de su esposo.
–¿Ahora deseas que sea niño? –le preguntó ella sonriendo, refiriéndose a su vientre que albergaba el nuevo miembro de la familia– así no tendrás que pasar por esto. Yo no me pondría celosa si un hijo mío se paseara sin camiseta –le dijo, pero él no respondió nada. Luffy no sabía ni él mismo por qué se sentía mal al ver a Lina así. Una y otra vez le llegaban los pensamientos de ver a la Princesa Pirata embarazada, como la otra jovencita. Y tal vez ése no era su peor miedo, sino que, para llegar a ese estado, Lina habría tenido que estar “a solas” con algún chico.
Luffy se volteó para ver a Nami frente a frente y luego la abrazó para besarla, recordando en ese momento las ya incontables ocasiones en las que él y ella habían tenido intimidad en ese barco. Con un poco de vergüenza, bajó la mirada y luego, súbitamente, la dirigió hacia su chica –¿crees que Lina-chan ya haya...? –no podía terminar la frase porque le daba temor decirlo, no lo soportaba.
–¿Tenido sexo? ¿Es eso lo que te preocupa? –soltó una pequeña carcajada Nami, pues, de cierta forma disfrutaba de la situación. Le parecía increíble que el hombre que había conquistado todos los océanos del mundo, ahora estaba dudoso, temeroso y hasta frágil. Él asintió, sin decir nada. No quería que las palabras “Lina” y “sexo” salieran de su boca en la misma oración. –Pues yo creo que no –dijo ella sinceramente, aunque luego sonrió pícaramente, como sólo ella sabía hacerlo– aunque nunca se sabe, Lina es una chica muy linda, y bueno, se parece mí, así que seguramente tiene muchos chicos tras de ella –decía la navegante mientras el rostro de Luffy estaba cada vez más desdibujado –también es una niña curiosa, y no dudo que algunas veces haya pensado sobre el sexo, ¿quién sabe? Es posible que en alguna ocasión le haya dado por experimentar.
Luffy se resistía a creerlo y prefirió mejor tratar de dormir. No creía a Lina capaz de ello, pero, por otro lado, la había visto en la tarde como ya una atractiva joven, no como su niña, ¿qué tal si ella se topara con algún chico “tipo Sanji” y que la convenciera de entrar en “intimidad”. Es por eso que mejor intentó olvidar el asunto de momento y caer rendido al cansancio. Nami, a pesar de su diversión a costa de su chico, tampoco creía que Lina ya había caído a los “encantos” de algún joven, pero, pensó, lo mejor sería hablar con ella al siguiente día.
Fuera del barco, caminando por la playa, una pareja disfrutaba de momentos de soledad. Finalmente los dos tenían tiempo para hablar sin que nadie los molestara. Él con su inseparable cigarro, escuchaba los reclamos de ella, quien caminaba lento, con un ritmo tan pesado como lo eran sus ojos en ese momento. Y es que al ver a una jovencita embarazada, Vivi, la princesa de Arabasta, sentía que su momento de ser madre podría pasar poco a poco.
–No puedo esperar a que a ti se te ocurra dejar la vida en alta mar –le decía– cuando acepté venir contigo, fue porque tú aceptaste regresar a mi país conmigo algún día, y ése ha llegado. Es hora de que vuelva a Arabasta –pero él no respondía nada. Quería estar con Vivi, pero su espíritu no deseaba dejar el mar, su corazón tenía un conflicto que sólo había sentido aquel día cuando iba a partir con Luffy y dejar el Baratie, ese restaurante flotante donde había crecido.
La Princesa le atacó pronto en donde más le dolía –aun si no te decides pronto, regresaré a Arabasta, contigo o sin ti –afirmó deteniendo su caminata– yo te quiero, pero si he de encontrar otro hombre que de verdad quiera estar conmigo, y desee darme la dicha de ser madre, que así sea –y ya que el cocinero siguió sin decir palabra alguna, la peliazul apretó los dientes en señal de enojo y decidió volver caminando; sin embargo, él alcanzaó a detenerla, más con su boca que con los brazos.
–Yo... no puedo decidir algo así tan rápido –le dijo– tengo toda una vida con ellos, no pretenderás que los deje así, sin más.
–¡Usopp-san lo hizo! –respondió ella de inmediato– siempre fue cobarde en las batallas, pero aquí fue más valiente que tú –Vivi le daba la espalda, cruzada de brazos, mientras sus ojos se humedecían– pero si tú quieres seguir viviendo en el mar y conocer chicas en cada puerto, sólo dímelo y terminamos con esta farsa.
Al escuchar eso, él se apresuró a tomarla con sus brazos, voltearla y atraerla hacia su pecho. Eso era un gesto que la calmaba y que la hacía pensar que realmente la quería; sin embargo, en esa ocasión ella quería más, ya aborrecía el silencio así que después de algunos segundos, intentó separarse de él.
–Está bien –al fin habló el cocinero –cuando termine todo esto de la chica embarazada y nos vayamos de esta isla, partiremos hacia Arabasta –ella alzó la vista, sorprendida, ansiando que él dijera algo que confirmara lo que acababa de escuchar– si debo dejar el mar para estar contigo, entonces creo que es tiempo –agregó él y fue lo último que ambos dijeron en el resto de minutos que estuvieron abrazados en la playa.
Al siguiente día, Nami pasó la mayor parte de la mañana platicando con Anna. Dándole consejos, posibles cuidados, indicándole lo que debía hacer en determinadas situaciones y lo que podría venir más adelante en cuanto a malestares y, en general, sensaciones. De cualquier forma, ni la navegante ni nadie podría preparar a la joven para lo más complicado, decirle a sus padres lo que sucedía.
Lina todavía estaba un poco enfadada con su padre por lo sucedido el día anterior y, a pesar de que lo tenía frente a ella, no le dirigía la palabra. Era la primera vez que ambos peleaban y eso podía verse en el rostro de Luffy, quien estaba bastante triste. Finalmente, él fue quien comenzó la plática –vaaaamoooss –le dijo– dime algo Lina-chan, tú y yo siempre la pasamos bien –le decía él con un puchero.
–¿Y de qué quieres hablar? –preguntó ella, tratando de reprimir el enfado.
–No sé –respondió él y empezó a darle vueltas a su cabeza para buscar un tema, aunque tal vez se le ocurrió uno de los peores posibles– qué tal de ese chico, el que te busca.
–¿Te refieres a Kyo? Si quieres, puedes conocerlo, pero sólo si prometes no portarte como ayer –le dijo– así verás que no tiene nada de malo cómo me vista o cosas así. Sólo confía en mí –tras eso, Luffy aseguró que no haría otro “berrinche” como el del día anterior y aceptó llevarlo a conocer a tal chico. Por supuesto, no iría vestida con tan diminutas prendas como el minishort y la parte superior de un bikini que tanto habían escandalizado a su padre. En vez de eso, mejor vestía unos jeans muy normales y una blusa sin mangas, pero sin escote. En casa se quedaría Hikari junto a su madre; Franky y Chopper estaban instalando algún extraño artefacto en la casa, como sorpresa para cuando la Princesa Pirata regresara.
–Luffy-san se ve extraño, mamá –señalaba el pequeño Seta mientras él, Robin y Zoro se encontraban en el pórtico de la vivienda.
–Luffy se ha dado cuenta de que Lina ya está empezando a ser mujer, y eso no le gusta –le respondió dulcemente su madre.
–¿Él quería que ella empezara a ser hombre?
–No, Seta –no pudo ella evitar reír– es sólo que a los padres no nos gusta que nuestros hijos crezcan tan rápido.
–O para ser más claros –intervino Zoro, quien estaba recargado en la pared exterior de la casa– no quiere que ningún chico toque a su princesa, y no lo culpo. Si algo le pasa a ella, el culpable terminará en pedacitos –tampoco el espadachín estaba muy a favor de que Lina pudiera tener novio, después de todo era su maestro, y hasta más que eso.
Nami pidió a Hikari que trajera a Ozzie, el novio de Anna. Él no sabía tampoco lo del embarazo de la rubia y era importante saber su reacción, si es que aceptaría sus responsabilidades o no. En tiempos anteriores los hombres dejaban hijos regados isla por isla, pero la era cambiaba y era hora de también hacer modificaciones en ese aspecto, y eso lo tenía muy claro alguien como Nami, claramente feminista.
El pelirrojo llegó guiado por Hikari y le sorprendió ver la escena. Con la tripulación del sombrero de paja en el lugar y con Anna teniendo un semblante que él había visto muy pocas veces. Fue la rubia la que comenzó a explicar todo, aunque no de la mejor manera.
–¿Recuerdas aquella vez cuando nos vimos en la playa a media noche y no había nadie más, que comenzamos a jugar en el agua y tú me quitaste el sostén por accidente, y que...
–Sin detalles, por favor –interrumpió Nami, a quien poco le importaba la situación en que se había dado el asunto.
–Si quieres hacer eso otra vez, no creo que decirlo aquí fuera necesario –le dijo Ozzie y Anna no pudo evitar darle un golpe en la cabeza.
–Tonto –le dijo al tiempo que él se frotaba la parte donde había recibido el puñetazo– vas a ser padre –confesó al fina. E´l no tardó mucho en hilar todo lo que le habían informado y perdió el sentido, cayendo recostado sobre una alfombra que la casa tenía en el piso de la sala.
–Bueno, eso sí no lo esperaba... –suspiró Nami.
Lina llegaba con su padre al apartamento donde Noriko y Kyo vivían. La Princesa pirata esperaba que, al ser fin de semana, ambos estuvieran en casa y así era. Tras tocar a la puerta, ésta se abrió dejando ver a la joven Noriko quien saludó efusivamente a Lina y luego cortésmente a Luffy.
–¿Quién es, Noriko? –salió hacia el recibidor Kyo, quien quedó petrificado al ver al figura del Rey Pirata ahí. Todos se quedaron en silencio, pues nadie sabía qué decir. Luffy quería, pero no estaba en su naturaleza ser el padre duro y poco comprensivo, para eso ya estaba Nami.
–¡Oye! –finalmente le dijo, estirando su mano y señalándolo con el dedo– ¿tu eres el que quiere hacer bebés con Lina-chan?
–¡Papá!
–Sanji dice que es lo que quieren todos los chicos que buscan a una chica –volteó él para con su hija, abriendo bien los ojos, sin saber si lo que había dicho era correcto o no.
–Si me permite decir algo, Monkey D. Luffy-san –intervino Noriko– lo que usted buscar decir es que mi hermano quiere ser el novio de Lina –le dijo sonriendo mientras Kyo reprimió los deseos de estrangular a su hermana.
–Bueno, entonces… –pensó el Rey Pirata las cosas antes de decirlas, aunque ya no serviría mucho, pues su hija estaba demasiado avergonzada como para que algo más la pusiera peor– ¿tú eres quien quiere ser el novio de Lina-chan? –repitió el ademán anterior. Kyo se quedó algo pasmado, debía responder algo y estaba demasiado nervioso como para hacerlo. Aun así, se armó de valor, tragó saliva y contestó a la pregunta algunos segundos después.
–Sí –afirmó viendo a los ojos a Luffy– yo quiero ser el novio de Lina –y a ésta se le quitó la vergüenza para mirar sorprendida a Kyo– si usted lo permite, claro –agregó el chico, aún sintiendo un poco de temor al tener a tal figura frente a él. Luffy se llevó su mano a la barbilla y empezó a cavilar. Se dio cuenta de que Kyo era un chico decente y parecía querer de verdad a Lina-chan. Luego volteó a ver a su hija.
–La que lo debe de permitir es ella –rió en su forma característica, recordando que Lina le había pedido confiar en ella y además sabía que la Princesa Pirata era una niña lista y sabría defenderse. Lina asintió a lo dicho por su padre y luego pidió a Kyo que le repitiera la petición, pero ahora dirigida hacia ella directamente.
Él se adelantó entonces y se puso frente a la pelinegro quien alzó un poco la vista, pues el chico era más alto que ella– ¿quieres ser mi novia? –así, sencillamente, sin más detalles, le preguntó.
–Claro, esperaba que me lo pidieras –le tomó la mano al tiempo que Luffy se rascaba la cabeza y Noriko aplaudía contenta– espero que podamos salir mañana –pidió y él afirmó con la cabeza– pero ahora me voy porque mi papá no soportará mucho tiempo esto –le dijo y tras tomar ahora de la mano a su padre, salió de ahí despidiéndose casualmente. Entre avergonzada y muy contenta, Lina corría jalando a su padre quien trataba de seguirle el paso. Ambos hacían saltar la arena de la playa por la que estaba pasando, él volteó un momento a ver el mar y éste, por un momento, reflejó la imagen de Lina cuando era pequeña, al menos eso le parecía haber visto. Al mirar de nuevo al frente, Luffy se alegró de ver cuán feliz había crecido su niña.
–¿Estás contenta, Lina-chan? –le gritó él. Ella se detuvo, regalándole una enorme sonrisa, una gran mezcla entre la inocencia de él mismo y la picardía de su esposa. Luego, ella se devolvió y se lanzó a abrazarlo.
–Estoy feliz porque tú eres mi papá –le dijo con su cabeza recargada en el hombro de él y sus ojos cerrados. Luego alzó la vista y lo vio a los ojos con esa mirada chispeante y que brillaba– ¿cómo haces para que todo te salga bien siempre?
–Yo creo que es de familia –respondió él…
kaizoku ou-
Mensajes : 179
Fecha de inscripción : 07/03/2011
Edad : 40
Localización : En un dojo, puliendo mi Kyokugen karate
¡Lina Chan ha regresado!
Siempre es muy grato ver los fics y capítulos de Lina-chan. Recuerdo que una de las razones por las que me uní aquella vez al club, fue porque tus fics eran de lo mejor y siempre me agradaba mucho leerlos. Ahora que los puedo ver aquí, y haber dejado los enlaces a ff.net, me voy a suscribir para que me lleguen los nuevos.
En fin, pues me ha encantado ver cómo ha empezado a crecer lina.
Saludos
En fin, pues me ha encantado ver cómo ha empezado a crecer lina.
Saludos
alex_orochi- Administrador
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Mensajes : 95
Fecha de inscripción : 04/03/2011
Edad : 37
Localización : Mm.... eso quisiera saber :P
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
¿A que es comoda la lista? xDDD ahora que la termino de ver puesta en escena a la plantilla me convence mas de que es totalmente una buena idea. Que ilu ver que el cap 43 esta en exclusiva por aca por el momento jajaja
Yo estoy atrasada con esto de los fics de one piece, hace tiempo que me habia pseudo retirado del fandom, pero seguro cuando pueda retomo. Aunque me gustaria leer todo de nuevo, asi que me va a llevar tiempo.
Yo estoy atrasada con esto de los fics de one piece, hace tiempo que me habia pseudo retirado del fandom, pero seguro cuando pueda retomo. Aunque me gustaria leer todo de nuevo, asi que me va a llevar tiempo.
Megu Sagara- Administrador
-
Mensajes : 35
Fecha de inscripción : 03/03/2011
Edad : 35
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Sí, pienso publicar los capítulos nuevos aquí, y más adelante en fanfiction, de hecho apenas estoy publicándolo allá. Gracias por los comentarios.
kaizoku ou-
Mensajes : 179
Fecha de inscripción : 07/03/2011
Edad : 40
Localización : En un dojo, puliendo mi Kyokugen karate
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Genial el fic, es bueno verlo por aca mi buen, creo que empezare a poner los mios por aca.
Gabe_Logan- Mensajes : 8
Fecha de inscripción : 05/03/2011
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Bueno ya leí el primer capi..(ahora leere los demas y si me da tiempo te dire k me pareció xDDD)
oWo debo decir k t kedo genial!!!! xDDD pocos saben plasmar la personalidad (la idiotez) de luffy cuando es pareja de alguien , lo ponen serio e incluso inteligente .-. pero se ve k tu has conservado su idiotez ¡Buen fic de verdad !
*leyendo , leyendo ..* (ske comento ahora por si despues no me da tiempo a comentar xD)
[edit]
linita rules!xD
oWo debo decir k t kedo genial!!!! xDDD pocos saben plasmar la personalidad (la idiotez) de luffy cuando es pareja de alguien , lo ponen serio e incluso inteligente .-. pero se ve k tu has conservado su idiotez ¡Buen fic de verdad !
*leyendo , leyendo ..* (ske comento ahora por si despues no me da tiempo a comentar xD)
[edit]
linita rules!xD
MAY- Mensajes : 4
Fecha de inscripción : 05/03/2011
Localización : en un bar cogiendo una borrachera xD
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Kaizoku ou cada cuando publicas los fics en:
- Fanfiction.net.
- onepiece-pairingclub.forospanish.com/t23-fanficmi-nombre-es-lina-chan-capitulos-43-en-proceso
- Fanfiction.net.
- onepiece-pairingclub.forospanish.com/t23-fanficmi-nombre-es-lina-chan-capitulos-43-en-proceso
LuNaZoRoSanViAcNo-
Mensajes : 4
Fecha de inscripción : 26/03/2011
Edad : 31
Localización : En el Thousand Sunny Go!!
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
No tengo un plazo determinado. A veces cada 2 semanas, a veces cada mes. Incluso he demoarado más.
kaizoku ou-
Mensajes : 179
Fecha de inscripción : 07/03/2011
Edad : 40
Localización : En un dojo, puliendo mi Kyokugen karate
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Capítulo 44 (La adolescente embarazada):
Link en fanfiction: http://www.fanfiction.net/s/3831528/44/Mi_nombre_es_Lina_chan
Link en fanfiction: http://www.fanfiction.net/s/3831528/44/Mi_nombre_es_Lina_chan
- Spoiler:
- La isla Celeste veía un nuevo día y la primera en levantarse en fue Lina, quien esa noche había dormido en el Thousand Sunny. Anna se había quedado en la casa junto a Hikari y Nami, pues la plática se extendió hasta muy tarde. Con sorpresa, cuando se hubo bañado y arreglado, y salió hacia la cubierta, vio a su compañero de escuela, Ozzie, tumbado en la arena de la playa cercana, viendo hacia el cielo. Ella bajó de un salto y fue a acompañarlo; se imaginaba en lo que el chico estaría pensando.
–¿Piensas en Anna y su embarazo? –preguntó la princesa pirata al sentarse junto a él.
–No podría pensar en otra cosa –respondió él– ahora no sé qué le voy a decir a mis padres, ni lo que haré cuando nazca el bebé –el chico se levantó y quedó sentado, viendo hacia el mar al que, por momentos, deseaba escapar para olvidar todo lo que estaba pasando– tú siempre sabes qué hacer Lina, ¿qué es lo que voy a hacer?
–No es verdad –dijo ella– no es que siempre sepa qué hacer. Creo que estaría igual que tú si me encontrara en la misma posición, pero lo que puedo decirte es que tienes que apoyar a Anna, no puedes dejarla sola. También tendrás que conseguir un trabajo de medio tiempo o algo así. Con respecto a tus padres, supongo que se enterarán tarde o temprano, así que será mejor que les digas cuanto antes. Sé que suena muy fácil todo lo que digo, pero no puedo hacer más, aunque claro que todos estaremos apoyándolos, no se quedarán solos, eso se los aseguro.
Ozzie deseaba que todo eso fuera un sueño y a la vez quería deshacer el pasado, pero no podía hacerlo y ahora tendría que tomar decisiones.
A la vez, una pareja platicaba en el Thousand Sunny –debes decirles cuanto antes –comentaba ella, mientras él dudaba y argumentaba que todavía no era tiempo. Para evitar una discusión, Sanji salió del camarote y se dirigió rumbo a la cocina. Ahí vio sus utensilios, muchos de los cuales tenían años, casi lo que él en la tripulación y sintió bastante nostalgia, pero ya había hecho un promesa y no se echaría para atrás. Cuando comenzaba a preparar el desayuno se sintió observado de pronto.
–Oye, Ero-cook –le llamaba Zoro desde la puerta– no es que me importe, pero Robin dice que algo te pasa o te molesta, ¿es cierto?
–¿Y a ti qué más te da, cabeza de marimo?
–Ya te dije que nada, pero justo como decía Robin, algo te pasa, ella nunca se equivoca en estas cosas –el rubio se quedó callado durante un instante, dándole la espalda al espadachín, cortando algo de fruta con un cuchillo.
–Es el momento de la despedida, Vivi insiste en que ya debo ir con ella, o se irá sola.
–¿Y sólo es eso? –replicó el peliverde– como si no supiéramos todos que pronto ibas a irte de aquí –el rubio iba a rebatir de inmediato pero la entrada de Robin a la cocina lo detuvo.
–Es verdad Sanji.
–¿Tú también, Robin-chan? ¿Acaso me quieren fuera de aquí?
–Bien sabes que no es eso. Todos partiremos de este barco tarde o temprano, tal vez incluso Luffy y Nami algún día se separen del Sunny para vivir en tierra firme. Lo que quiero decir es que, aunque no nos guste, sabemos que es normal que tú y los demás se vayan poco a poco.
–Tengo la responsabilidad con Vivi-chan –cambió Sanji su semblante mientras encendía un cigarrillo más– es hora de que siente cabeza al parecer, finalmente.
Zoro estaba por soltar algo, pero su mujer lo detuvo antes de que hiciera enfadar al cocinero. Pero sin que los tres se dieran cuanta, detrás de la pared de madera, hacia afuera, tanto Seta como Lina, quien apenas volvía de platicar con Ozzie, escucharon todo, y no estaban felices. Lina entendía bien que finalmente la tripulación debía separarse, mientras que Seta esperaría una explicación de sus padres en cuanto a eso.
La princesa pirata decidió mejor ir a casa de su amiga Hikari ver a su madre y el estado de Anna. Era precisamente el día en el que la rubia debía decirle a sus padres lo que le sucedía. Un domingo parecía propicio para ello, pero cuando Lina abrió la puerta de la casa, Anna estaba sentada en un sillón, prácticamente temblando.
–Como puedes ver, tu amiga tiene bastante miedo, pero tendrá que ir tarde o temprano. Y más vale que sea temprano –le decía Nami. Lina estuvo de acuerdo y entre ella y Hikari la animaron a tomar el Den Den Mushi y llamar a su casa. La rubia lo hizo finalmente y esperó el tono, estuvo cerca de colgar, pero se armó de valor y esperó a que respondieran. Finalmente contestó una voz femenina, seguramente la madre de ella.
–¡Hija! Hace mucho no nos hablabas –exclamó con alegría ella, haciendo más difícil la confesión de Anna– ¿necesitas algo? Si es así, tu papá puede ir a llevártelo.
–No, es algo que tengo que decirles –la rubia reunió todas sus fuerzas y apretando la mano de Hikari quien estaba junto a ella en el sillón, finalmente reveló todo– yo estoy... voy a... tú serás... ¡estoy embarazada!
La bocina del caracol ya sólo tenía una respiración del otro lado, pero no tardó demasiado en estallar. La madre de Anna, exaltada, comenzó a gritar y a regañar a su hija sin contemplaciones, aludiendo también a que ella en muchas ocasiones le había mostrado su inconformidad con que la adolescente tuviera novio y que le advirtió que ello le podía suceder.
Sin poder soportar más, Nami arrebató la bocina a Anna y de inmediato la defendió.
–Ella es una chica, una adolescente, y esto puede pasar, tal vez si hubiera explicado realmente cómo podía protegerse, no estaríamos teniendo esta discusión.
–¿Pero quién eres tú? –preguntó con voz indignada la madre de Anna. Pero Nami no demoró en responder. Mostrando ojos enfadados y con voz recia, aunque sin alzarla demasiado, dio su réplica.
–Soy la mamá de una compañera de Anna, ¿y sabe algo? Yo me embaracé a los 18 años, y no podría pedir una mejor niña que Lina –la Princesa Pirata sonrió, no sólo por el cumplido que su madre le hacía, sino por la defensa que la pelirroja hacía de su compañera– ella cometió un error –continuaba Nami– pero ustedes tienen que apoyarla, y si no lo hacen, iré hasta donde estén y no querrán haberme conocido.
–¿Me amenazas? –preguntó desafiante todavía la madre de Anna.
–No diferente a lo que usted hizo con su hija –le aseguró Nami y esto hizo callar a su interlocutora. Se escuchó al otro lado un intercambio de palabras, seguramente entre el padre de Anna y la madre. Ella, unos segundos después, con voz más tranquila, pidió a Nami que le comunicara de nuevo con su hija y la pelirroja así lo hizo.
Anna tomó la bocina y escuchó a sus padres. Ya las voces eran calmadas y no parecían de regaño. La jovencita sólo asentía o afirmaba mientras empezaba a derramar lágrimas.
–Vaya mamá, tu ambición llegó hasta allá, al parecer.
–No, ni que fuera tu papá –rió la pelinaranja.
–Bueno, yo creo que asustas más que mi papá –se burló la adolescente, a sabiendas que en ese momento, su madre sólo le dedicaría una mirada casi asesina, y tal cual lo hizo Nami. Luego, cuando Anna terminó de hablar y colgó, todas, incluyendo Hikari quien se había mantenido al margen hasta ese momento, supieron que todo parecía estar bien, dentro de lo que cabía en el asunto. La rubia debía regresar a su casa en cuanto el semestre culminara y entonces decidirían qué hacer, aunque debía hablarles pronto para comunicarles la situación del “chico”, es decir, de Ozzie.
–Lo obligaremos a estar contigo –afirmó Kayla, quien estaba recargada en el marco de la puerta de la casa, como si ya llevara horas ahí– si no quiere, le daremos una paliza.
–Tú siempre con tus comentarios tontos, cabeza de cebolla –Hikari no perdió la oportunidad para reñir un poco con su amiga-enemiga..
–¿Y a ti quién te preguntó, cabeza de zanahoria? La del asunto es Anna, no tú, y... –pero Lina las interrumpió, como siempre ocurría.
–Nadie va a obligar a nadie, estoy segura que Ozzie tomará su responsabilidad, ¿verdad Anna?
–Yo creo que sí –respondió cabizbaja la rubia– a pesar de todo, él es un buen chico –afirmó sonriendo al final.
Tras insistir, Lina y Hikari, e incluso Kayla, lograron que Anna aceptara quedarse en la casa de la pelirroja, para poder cuidarla, a pesar de que apenas estaba en sus primeras semanas.
Nami se retiraba entonces, pero advirtió que todavía estaría un día más por ahí, para explicar más cosas a la rubia adolescente sobre su estado, el cual también compartía la navegante, aunque ya con más semanas. Cuando ya estaba fuera de la vivienda, Lina la alcanzó, para caminar junto a ella hacia el barco.
Ambas figuras reflejaban el color amarillo del sol de pasado el mediodía, pero la Princesa Pirata se estaba quedando atrás, lo que Nami finalmente advirtió, pues en varias ocasiones tuvo que aminorar el paso.
–¿Qué pasa, mi niña? –preguntó maternalmente, tal y como lo hacía siempre que estaba de bueno humor. Lina explicó lo que había escuchado más temprano en el barco, sobre Sanji y su inminente salida del barco, y la princesa pirata no pudo evitar llorar. No lo hizo escandalosamente, sólo derramaba gruesas lágrimas que rodaban por sus mejillas.
–Es algo lógico –le dijo Nami, para su sorpresa– tu papá y yo ya sabíamos que él tarde o temprano iba a irse. Y ya era justo para Vivi. No podemos esperar que se queden con nosotros para siempre, es algo egoísta. Supongo que en adelante, Robin y yo cocinaremos, porque Luffy y Zoro no son muy buenos en eso, ni tampoco Franky o Chopper.
La respuesta fue parecida a la de Robin para con Snaji anteriormente y Lina tuvo que resignarse. Como si tuviera que dejar atrás recuerdos y vivencias, así sacudía sus sandalias cada vez que éstas se llenaban de arena de la playa. Y con cada grano que salía de su calzado, llegaba a su mente alguna remembranza del cocinero, a quien conocía desde que tenía memoria.
Cuando ambas llegaron al barco, todos estaban en cubierta, parecían estar platicando. El tema era precisamente la partida del cocinero. Tal y como lo había predicho Nami, ella y Robin se encargarían de la cocina. El rubio y la princesa partirían a Arabasta luego de que el Sunny saliera de la isla Celeste. Lina y Seta no parecían demasiado felices, pero aceptaron la decisión que los mayores habían tomado.
De esa forma, Lina pasó el resto del día en el Sunny y decidió quedarse ahí a dormir. Hikari sabía bien que si su amiga no llegaba, seguramente estaría con su familia, por lo que no se iba a preocupar.
La Princesa Pirata se acomodó en su antigua cama y se quedó ahí, sin dormir, sólo con sus pijamas y mirando por una ventana a las estrellas. No tenía sueño alguno, sólo dejaba que la brisa de la noche de sábado la refrescara. Así pasó cerca de una hora hasta que sus ojos estaban por cerrarse. Fue entonces cuando esuchcó que alguien gritaba su nombre. Se levantó en sus shorts y blusa de tela ligera y miró por la ventana. Quien la buscaba era Kayla.
Lina se cambió rápido y a toda velocidad bajó del barco, pues vio algo que no era normal en el rostro de su amiga. En cuanto estuvo frente a ella, preguntó lo que sucedía.
–¡Ese bastardo no está!
–¿De quién hablas?
–Del novio de Anna. No está por ningún lado. Hikari y yo lo hemos estado buscando por todos lados, pero nadie lo ha visto, seguro ha escapado el muy cobarde –decía realmente enfadada la también espadachín.
–Ozzie... –una real angustia se apoderó de Lina, quien de pronto se quedó sin idea de qué hacer...
kaizoku ou-
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Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Muy bueno que bien que lo seguiste
Gabe_Logan- Mensajes : 8
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Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Les pongo los capítulos más recientes:
Capítulo 45:
Capítulo 46:
Le quedarán un máximo de tres capítulos a este fic.
Capítulo 45:
- Spoiler:
- Lina se cambió de ropa la más rápido posible y bajó del barco para acompañar a Kayla. Iban a la casa de Hikari, pero ésta las encontró antes de llegar, justo a medio camino. La pelirroja informó que no había podido encontrar a Ozzie por ningún lado. Era como si se lo hubiera tragado la tierra.
–¿Cómo está Anna? –preguntó Lina de inmediato.
–No es que esté mal, sólo se quedó callada y dijo que quería dormir.
–Ella no es así –afirmó Lina– puedo adivinar que está muy triste –dijo con un tono de enfado que de inmediato retiró– pero no puedo creer todavía que Ozzie se haya ido de la isla. Tal vez sólo ha querido estar solo, o... no lo sé.
–Ya acéptalo –dijo Kayla– es un cobarde que no quiere enfrentar su responsabilidad. Además Hikari y yo ya buscamos por toda la isla. Seguramente ha pillado un barco y se ha largado de la isla.
Lina no estaba muy segura de eso. De cualquier forma, instó a sus amigas a regresar a la casa y pensar en algo allí. Al llegar, vieron que Anna estaba dormida en la sala, por lo que la llevaron hasta la cama para que durmiera mejor. Las tres chicas, luego, fueron a la cocina.
–Me prepararé un café, ¿quieren? –preguntó Hikari.
–¿Un café? Te estás convirtiendo en una anciana, cabeza de zanahoria –antes de que Hikari respondiera, Lina intervino, no quería una discusión sin sentido en ese momento. Aceptó el café y Kayla finalmente también quiso una taza. Todo se quedó en silencio y la Princesa Pirata tuvo tiempo para meterse en sus pensamientos. No mucho después se le ocurrió una idea.
–De algo tiene que servir esa habilidad, la "Ambición" –dijo y se sentó en el centro de la habitación de la sala, con sus piernas en posición de flor de loto, como si fuese a meditar. Se concentró durante dos o tres minutos y luego abrió los ojos.
–¿Encontraste algo? –preguntó Hikari.
–No, nada –respondió ella– a decir verdad, no sé exactamente cómo funcione. Sé que se pueden sentir las personas y sus movimientos, pero tal vez sólo cuando están cerca... –se quedó pensativa un momento– mejor vayamos con mi mamá. No le va a hacer mucha gracia que la despertemos, pero no me queda otra opción.
Así, mientras Hikari se quedaba a cuidar a Anna, Lina y Kayla regresaron al Sunny. La Princesa Pirata se acercó al camarote de sus padres y tras abrir la puerta con cuidado constató que estaban ya dormidos. Hizo una mueca de molestia, no por el hecho de que no estuvieran ya despiertos, sino porque tendría que levantarlos. De cualquier forma se acercó sigilosamente hacia la cama y, con cuidado, como si no ser tan brusca reprimiera el inminente enojo de su madre, tocó el hombro de la navegante. Ésta no demoró en despertar.
–¿Te das cuenta de la hora que es, Monkey D. Lina? Ya estás bastante grande como para venir a despertarme en la noche.
–No es tan tarde, mamá.
–Ya déjate de cosas y dime qué pasa –se sentó la pelinaranja. Su hija vio por un momento a Luffy, quien seguí todavía dormido– él no va a despertar, con los años se ha vuelto casi tan dormilón como Zoro.
–El novio de Anna desapareció. Debía estar con ella antes de la hora de dormir, pero no ha aparecido, lo hemos buscado por todos lados y no está, es como si se hubiera esfumado.
–¿Y en qué puedo ayudar yo?
–Pues, traté de utilizar mi Ambición para encontrarlo, pero creo que no funcionó, es que no sé cómo usarla todavía.
Nami se sorprendió, no por el hecho de que Lina supiera ya sobre la Ambición, sino porque intentara utilizarla. Era una adolescente apenas. La navegante explicó entonces a su hija que lo que intentaba hacer se suponía bastante difícil, por no decir que imposible.
–Tal vez tu padre podría –afirmó Nami– pero como nunca ha pasado tiempo con ese chico, no creo que en este caso le sea posible. Tal vez tendrán que esperar hasta que aparezca o constatar que sí se ha ido. Ahora lo importante es estar con su amiga.
Pero a pesar de lo que su madre le había dicho, Lina no se rindió. Kayla se retiró a dormir, pero la Princesa Pirata comenzó a vagar por el pueblo, con alguna esperanza. Estaba sumida en sus pensamientos, no creía que realmente Ozzie hubiera abandonado a Anna, algo le decía que estaba cerca, por algún lado.
Llegó hasta el centro de la ciudad, no demasiado lejos de la escuela y entonces decidió ir al campo de beisbol y se sentó en el montículo, en aquel lugar donde tenía su puesto como lanzadora. De pronto, cerró sus ojos y le pareció que estaba en otro mundo, en un vacío completo, y diversas corrientes eléctricas le cruzaban por la cabeza, o más bien, por la mente. No sabía lo que estaba pasando pero, de alguna manera, pudo identificar uno de esos impulsos.
Como guiada por algo invisible, Lina caminó con rumbo a la parte posterior de la escuela. Nunca había estado allí, había algunos árboles, maleza y piedras, detrás de la enorme barda que separaba el plantel de ese lugar. No sabía lo que estaba haciendo allí, pero comenzó a caminar un poco. Unos pasos después, sintió que su pie se hundía, y con él, un poco después, todo su cuerpo. Había caído a un agujero.
Tras frotarse el trasero por la caída, la Princesa Pirata se encontró con alguien en ese lugar. Era nada menos que su amigo Ozzie, quien la miraba con rostro asustado; sin embargo, luego se calmó.
–Aunque seas tú, no puedo creer que hayas encontrado mi escondite –se sentó como si estuviera rendido– esto no lo sabe nadie, ni Anna.
–¡Ya me di cuenta! –se adelantó la Princesa Pirata y le dio un coscorrón en la cabeza al pelirrojo, al puro estilo que su madre lo haría– ¿sabes cómo nos tenías de preocupadas? ¿Sabes que Anna estuvo llorando?
–Pero ya le había dicho a Anna, y te había dicho a ti que no iba a escapar –afirmó él– sólo quería estar solo un poco. Quería pensar, quería convencerme de que todo esto va a pasar.
Lina no pudo ya enfadarse con su amigo. Prefirió sentarse con él un momento y ahí se quedaron sin decir nada por varios minutos. Luego, Lina instó a irse, debían ver a Anna y a tranquilizar a todos. Los dos chicos caminaron por la isla y llegaron a la casa de Hikari. Anna no se enfadó cuando despertó, sólo abrazó al pelirrojo y todo pareció quedar en el pasado.
Lina entonces, dejando ya todo en orden, se despidió por esa noche de sus amigos y regresó al Sunny. Su madre, quien tenía el sueño ligero esa noche debido a lo que sucedía, se dio cuenta de inmediato de que su hija estaba nuevamente por ahí. Salió a recibirla y luego se dedicó a arroparla como si fuese una niña pequeña, a pesar de las protestas de ella. Lina se dedicó además a relatar cómo es que había encontrado a Ozzie, y aunque su madre no dijo mucho, se quedó pensativa sobre el asunto.
Al siguiente día, Lina, por haber estado la mayor parte de la noche en vigilia, no despertó junto con el alba, como casi siempre hacía. Su madre la vio dormida en su cama y decidió dejarla ahí, al fin que era domingo. Cuando Luffy despertó, Nami contó lo sucedido el día anterior con su hija.
–Seguro fue ambición –respondió él simplemente mientras se dirigía a la cocina.
–Pero apenas si va a cumplir los dieciséis años –replicó la navegante– a su edad, tú ni siquiera sabías lo que era la Ambición.
–A su edad, Luffy ni siquiera había salido del East Blue –intervino Robin, a quien seguía Seta– desde que nació, ha estado en el mar, rodeada de peligro, y además entrenada por un espadachín de este barco que resulta ser muy fuerte. A mí no me sorprende.
–A mí tampoco –llegó Zoro a cubierta, bostezando mientras acomodaba sus katanas en su faja– Mihawk me lo dijo. Si ella tuviera como meta ser la próxima Reina de los Piratas, lo habría hecho no mucha más facilidad que Luffy.
–Pero eso ya no es necesario, mi niña no tiene ya que pelear en el mar, son otros tiempos –afirmó Nami, restándole finalmente importancia al asunto de la Ambición. Se metió a ala cocina y se dedicó a preparar el desayuno para Lina. Lo demás lo prepararía Sanji cuando despertara, lo cual seguramente sería pronto.
A pesar de lo deliciosa que pudiera ser la comida preparada por Sanji, en el desayuno, la Princesa Pirata siempre había estado encantada de comer lo hecho por su madre, por lo que al entrar a la cocina, rápidamente se sentó en la mesa, feliz de recibir las viandas matutinas. Tras comer, su madre insistió en ir a ver a Anna.
Al llegar a la casa de Hikari, Nami dio algunas instrucciones a Anna y luego se despidió.
–¿Se van tan pronto? –preguntó Lina sorprendida.
–No es bueno que estemos aquí tanto tiempo, lo sabes bien. Pero además, tienes que venir al barco, porque será la última vez que veas a alguien por mucho tiempo.
Lina sintió como si su pecho tuviera un vacío, porque supo rápidamente que esa sería la última vez que Sanji visitara la Isla Celeste, al menos como cocinero de la tripulación. También, al igual que Usopp, debía irse. Con un paso lento, casi arrastrando los pies, como su esto retrasara también la partida del cocinero, Lina siguió a su madre en dirección al Sunny.
La Princesa Pirata no protestó. Sabía que no ganaba nada con ello ni tampoco iba a evitar lo que estaba por suceder, y cuando vio al barco a lo lejos, también notó que Sanji estaba en cubierta, recargado en la barandilla del Sunny y, como siempre, fumándose un cigarrillo. Lina no pudo evitar llorar, era parte de su familia.
Sanji bajó del barco y con una sonrisa se acercó a Lina, a quien, un momento después de tirar el cigarrillo que fumaba, abrazó como pocas veces lo había hecho.
–Ya eres toda una dama, no debes llorar de esa manera –le dijo el cocinero, pero la Princesa Pirata no estaba dispuesta a hacerle caso en ese asunto– seguro que pronto volveremos a vernos, no es como si me esfumara de este mundo o algo por el estilo. Estaré en Arabasta y cuando vayas, podrás pedirme toda la comida que tú quieras, cocinaré lo más delicioso del mundo sólo para ti.
La adolescente asintió, mientras se limpiaba las lágrimas. Vivi se acercó a ella y también se abrazaron, aunque menos efusivamente. Así, tras algunas palabras más, terminó la despedida de éstos con Lina.
–No llores más, mi niña –le pidió con ternura Nami, quien detestaba ver lágrimas en los ojos de Lina– esto es así, y lo sabes, pero pronto te llevaré a verlos. Por lo pronto, pórtate bien y hazme orgullosa, como siempre.
–No dejes de estudiar, y si necesitas cualquier cosa, hazlo saber –le dijo Robin, quien también estaba ya en la playa.
–Y no dejes de practicar el kendo.
–No lo haré, Zoro-san –respondió ella.
–Si necesitas que repare cualquier cosa, sólo llámanos y vendré enseguida, Lina-chan –le afirmó Franky con una gran sonrisa.
–Vendremos pronto y espero que te cuides y te mantengas sana –le dijo Chopper, a quien un momento después la Princesa Pirata abrazó como a un muñeco de peluche.
Todos menso Luffy se habían despedido de la adolescente. El Rey Pirata estaba escondido tratando de hacerle una broma a su niña, pero ella no cayó.
–Sé que estás en esa palmera, papá –sonrió– no puedes engañarme.
Luffy no se sorprendió por ser descubierto y bajó del árbol para despedirse de su hija de la misma manera efusiva que siempre lo hacía, llenándola de abrazos, besos y cariños. Poco después, los Sombrero de Paja subieron al Sunny y partieron de Isla Celeste, aunque volverían a más tardar al final del semestre.
A pesar de todo, no había sido una despedida tan triste. Lina volvió de inmediato a la casa de Hikari para prepararse rumbo al siguiente día de escuela. Sabía que la próxima vez que el Thousand Sunny regresara, sería con menso tripulantes, pero se animó a sí misma diciéndose que, al menos, ahora tendría personas queridas en más partes de ese océano y del mundo...
Capítulo 46:
- Spoiler:
- El Thousand Sunny se acercaba a su próximo destino: la isla de Arabasta. Ya que Vivi no quería causar demasiada expectación entre los habitantes de la ciudad de Erumalu. Vivi tenía deseos de que sus nakama le acompañaran a Alubarna, pero Sanji se negó a ello.
–Es mejor que nos despidamos aquí, no tiene caso ir hasta Alubarna todos juntos –dijo el rubio, enciediendo otro de sus cigarrillos.
–¿De qué hablas? –reaccionó Vivi– no tenemos por qué despedirnos aquí, es mejor hacer una fiesta en el palacio y...
–Él tiene razón –intervino Nami– pronto vendremos para tener una fiesta todos, hasta traeremos a Lina.
–¡Nami-san! –exclamó Vivi incrédula.
–Una princesa debería saber lo que estamos pensando –dijo Robin, acallando a Vivi con su semblante tranquilo y un poco sombrío, aunque luego la arqueóloga sonrió– Sanji no quiere ningún distractor que lo haga retractarse de su decisión. Entre más pronto nos vayamos, más pronto podrá acostumbrarse a esta isla y a estar alejado de nosotros. Si nos quedamos unos días más, será más complicado para él.
Muy a su pesar, la princesa de Arabasta tuvo que entender la situación. Regresó al lado de Sanji, lo tomó de la mano y observó a los Sombrero de Paja despidiéndose sencillamente del cocinero. Luego, todos subieron al barco, listos para zarpar, cuando el cocinero se inclinó hasta que su frente tocó el suelo, de la misma forma que le hiciera ante Zeff, aquella vez que partió del Baratie para comenzar su viaje con Luffy.
–¡Lo que he pasado con ustedes, jamás lo olvidaré! –dijo– Luffy, de no ser por ti, nunca hubiera cumplido mis sueños, gracias a todos, incluso a ti, cabeza de marimo –y por esa única vez, Zoro no hizo ningún comentario al respecto -¡muchas gracias!
–¡No ha sido nada! ¡Gracias! –le respondió Luffy con alegría y una enorme sonrisa– gracias a ti también por todo, y pronto vendremos, más vale que me des mucha comida.
El rubio asintió, escondiendo sus lágrimas y de forma borrosa vio como el Thousand Sunny se iba alejando de la isla de Arabasta. Sanji se quedó mirando hasta que el barco se perdió en el horizonte. No sabía que sus nakama, Luffy incluido, habían aguantado las lágrimas para no hacerle más difícil la despedida.
Si para los Sombrero de Paja, lo más interesante que había sucedido desde aquella despedida, era ver a Robin y a Seta ayudándose en la cocina, y el crecimiento desmesurado del vientre de Nami, para Lina-chan la situación no era tan distinta. Días de clase, de estudio y beisbol. Parecía que sus aventuras estaban finalizando.
Para muchos esa calma diaria podría significar el bienestar e incluso la felicidad, para muchas personas, pero no para Lina. Su sangre pirata no podía soportar estar quieta todo el tiempo, se sentía más intranquila que de costumbre y hasta con una especie de paranoia.
–Tienes que controlarte –le decía Hikari mientras estudiaban– ¿no tienes suficiente con el beisbol?
–El problema es que no hay torneos pronto, y el entrenamiento no es tan intenso –suspiró Lina– necesito salir al mar. Antes de venir a la preparatoria había pasado toda mi vida en el océano, creo que necesito embarcarme aunque sea algunos días.
–¿Y por qué no le dices a tus papás que vengan un fin de semana por ti?
–Tal vez eso haga –sonrió la Princesa Pirata y fue a su habitación por el Den Den Mushi para llamar a su madre. Lo hizo una y dos veces, pero no obtuvo respuesta, por lo que creyó que seguramente el Sunny estaría fuera de rango.
Pero así sucedió durante los siguientes días. El Den Den Mushi simplemente no establecía conexión. No era que Lina dudara de sus padres, pero inevitablemente comenzó a preocuparse. Y no era una aprehensión normal, podía sentir que algo andaba mal.
Al tercer día, temprano, alguien apareció en el portal de la casa de Hikari y Lina, se trataba de Kyo. Aunque Lina y Kyo eran novios formales, su relación iba por demás lenta. Habían salido en pocas ocasiones y se podía ver que no avanzarían en un buen rato. Por ello, Lina pensó de inmediato que se trataba de una invictación.
–¿Quieres que pasemos todo el día juntos? –preguntó ella sonriendo al verlo.
–No es que no quiera –respondió él– pero creo que esto es más importante –en sus manos, Kyo tenía un periódico y se lo entregó a su chica.
Una de las diferencias entre Nami y Lina, era que a la adolescente no le gustaba mucho leer el periódico y por ello no se había dado cuenta de la noticia. El Rey Pirata había hecho un pacto con el criminal más famoso de esta Nueva Era, Marshall D. Teach “Kurohige” y se había dejado apresar por él. Todo el mundo estaba atónito.
–Mi papá... ¿Qué sucedió? –y al igual que cualquiera, Lina no podía creerlo y Kyo no tenía las palabras adecuadas por lo que no dijo nada– esto es muy extraño, ¿así nada más? Tengo que ir con ellos.
–¿Pero qué vas a hacer? ¿Vas a ir tú sola?
–No tengo otra alternativa –respondió ella.
–La tienes, yo voy contigo.
–También Kayla podría ir –le dijo Hikari– yo no me ofrezco porque seguramente sería un estorbo.
En poco tiempo, Kayla aceptó, no sólo por ayudar a Lina, sino porque también tendría un buen pretexto para faltar a clases y hacer un buen uso de su espada. De esa forma, Lina, Kalya y Kyo partieron en una pequeña embarcación, propiedad de la ojiazul.
Así, siguiendo la dirección de su Vivre Card, Lina logró llegar, al cabo de cuatro días, al lugar donde se encontraba el Thousand Sunny. Se podía ver que el barco había estado inmiscuido en una batalla hacía poco. El pequeño velero de Lina y compañía se acercó cautelosamente al Sunny cuando, de pronto, un ojo brotó de la nada en la barandilla. Inmediatamente después, en la cubierta del Sunny apareció la espigada figura de Nico Robin, quien fue la que recibió a la visita.
–¿Qué haces aquí, Lina-chan? –preguntó la arqueóloga con sorpresa.
–Supe que algo no andaba bien –respondió la adolescente y luego, al subir al barco, vio los destrozos quer había– y ahora puedo constatarlo, ¿qué pasó aquí?
–Mejor vamos con tu madre que está allá adentro, ya te lo explicaremos.
Nami estaba en su camarote, sentada en la cama, llorando en silencio. Lina pensó que jamás la había visto de esa manera. La navegante se sorprendió al ver a su hija ahí, pero la abrazó con fuerza cuando se acercó a ella.
Lina no se atrevía a preguntar lo sucedido, tenía un poco de temor por la respuesta, por lo que Kayla alzó el periódico y cuestionó si lo que decía era cierto.
–No tanto que haya sido un pacto –les dijo Nami– él lo hizo para protegerme. Estábamos en una isla cercana, Robin, Seta y yo fuimos a pasear mientras los demás se quedaron en el Sunny; nos estaban esperando.
–¿Quiénes? ¿Los hombres de Kurohige? Ustedes pueden vencerlos.
–Si hubieran sido sólo ellos, habríamos salido ilesos –intervino Robin– Kurohige estuvo juntando piratas que tenían una historia en contra de nosotros, una multitud de piratas.
–Fue un ejército el que atacó el Sunny –siguió Nami– Zoro y tu papá, junto a Franky y a Chopper, no la tuvieron fácil, pero pudieron derrotarlos, a pesar de que los atacantes habían sido piratas muy poderosos en tiempos de antaño.
–¿Y qué pasó con ustedes?
–Kurohige nos atacó –respondió la pelinaranja– no sé cómo hizo para esconderse en esta isla sin que lo notáramos, pero me capturó a mí. Robin pudo escapar y avisar a Luffy y a Zoro. Tu papá y los demás acabaron con los otros piratas, pero, a cambio de mí, él se entregó a ese cerdo de Teach. Le pusieron unas esposas de kairouseki y se lo llevaron, no sé a dónde.
–No sin antes darle una paliza a Zoro –dijo Robin, cabizbaja.
–Nada que no pueda soportar, sólo que no podía actuar en ese momento –entró el espadachín a la habitación.
–Claro que fue serio –se levantó la arqueóloga a ayudarle a sostenerse– no deberías estar fuera de cama, Chopper dijo que debías recuperarte de heridas tan graves.
–No es nada –afirmó él– me duele más la estupidez con la que hemos actuado, tantos años sin un combate de verdad nos hizo confiados y ahora cada segundo que perdamos es vital para Luffy. Aunque un nuevo Rey Pirata no pueda existir en esta era, Kurohige sólo quiere venganza y matar a Luffy.
–¡Eso no lo permitiré! –afirmó Lina– ¡iré ahora mismo y traeré a mi papá de vuelta!
–No digas tonterías Lina –la interrumpió su madre– él es muy fuerte, no te imaginas cuánto, no quiero que te arriesgues de esa manera. Además, no sabemos dónde está.
–Yo puedo percibir dónde está, eso no será problema –dijo Zoro.
–¡Ése no es el punto! –la angustia de Nami se volvió enfado hacia el espadachín.
–Voy a ir a por Luffy, y Lina me acompañará –afirmó él, enfrentándose a la navegante– tú no lo aceptas porque eres su madre, pero esta niña es mucho más fuerte que Luffy cuando apenas le conocí, ella puede pelear bien.
–Pero...
–¡Debo ir mamá! –exclamó la Princesa Pirata– también por mi futuro hermano o hermana –dijo, acercándose al vientre crecido de su madre– no dejaré que nazca y crezca sin haber conocido a su padre –abrazó a Nami y pegó su cabeza en la barriga de ésta. Cerró los ojos un momento, pero luego los abrió sorprendida.
–¿Qué pasa, mi niña? –le preguntó Nami.
–Nada –sonrió ella– es sólo que, creo que ya sé qué es lo que llevas ahí adentro –le dijo. Nami recordó que, cuando estaba embarazada de Lina, Luffy supo desde meses atrás del nacimiento, que iba a ser una niña, y ahora, la misma Princesa Pirata parecía emular la situación con su futuro hermano o hermana.
–¿En serio? ¿Qué es?
–No te lo diré –respondió Lina– será un secreto hasta que mi papá regrese sano y salvo. Entonces se los diré a ambos –afirmó sonriendo, pero pronto borró ese gesto del rostro.– Por cierto, ¿dónde está Franky-san?
Lina fue llevada por Robin al taller del carpintero. Éste se encontraba reconstruyéndose, mientras que sus partes biológicas estaban siendo curadas por Chopper.
–Franky-san... –sólo pudo exclamar Lina al verlo en un estado tan malo.
–No te preocupes, Lina-chan –le dijo él al advertir que ella estaba ahí– me tomaron por sorpresa, pero pronto estaré mejor que nuevo.
–Traeré de vuelta a mi papá –aseguró ella.
–Sé que lo harás, pequeña. Nosotros defenderemos el barco ante cualquier eventualidad.
Tras unos abrazos con Franky y Chopper, Lina se despidió momentáneamente de su madre, de Seta, y tanto de Kayla como de Kyo. NInguno de los dos era demasiado fuerte, y la albina podría ayudar a defender el Sunny en caso de cualquier ataque.
–Siento no poder ayudar mucho –le dijo Kyo.
–Con acompañarme es suficiente, gracias –dijo y le besó en la mejilla.
De esa forma, Lina, Robin y Zoro, se embarcaron en busca de Luffy y Kurohige.
Le quedarán un máximo de tres capítulos a este fic.
kaizoku ou-
Mensajes : 179
Fecha de inscripción : 07/03/2011
Edad : 40
Localización : En un dojo, puliendo mi Kyokugen karate
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Ehhhh??? Así que eres tú el autor de esa divertida historia??? xDD
Pero si yo me la había leído mucho antes, en fanfiction.net XD Y luego me entero de que tú me habías leído a mi ahí también. El mundo web de pronto se ha hecho pequeño.
Recuerdo que me pasé una buena tarde leyendo todos esos capítulos. Haber como les va con Kurohige.
(Por cierto, las partes de Lina con Luffy son mis favoritas. Muy buenas) Lo mejor es que, incluso en versión padres, logras capturar la personalidad de Nami y Luffy a la perfección.
Especialmente cuando Luffy habla del: "embrion misterioso" xD
Pero si yo me la había leído mucho antes, en fanfiction.net XD Y luego me entero de que tú me habías leído a mi ahí también. El mundo web de pronto se ha hecho pequeño.
Recuerdo que me pasé una buena tarde leyendo todos esos capítulos. Haber como les va con Kurohige.
(Por cierto, las partes de Lina con Luffy son mis favoritas. Muy buenas) Lo mejor es que, incluso en versión padres, logras capturar la personalidad de Nami y Luffy a la perfección.
Especialmente cuando Luffy habla del: "embrion misterioso" xD
Llaelien- Mensajes : 14
Fecha de inscripción : 18/01/2012
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Pues gracias xD La verdad que con este fic fui aprendiendo bastante, ha sido muy largo y he adecuado mucho mi forma de escribir, eso se puede notar si se leen los primeros capítulos y luego se dan una ojeada a los últimos.
A veces pienso que le di muchas virtudes a Lina, supongo que no pude evitarlo xD
A veces pienso que le di muchas virtudes a Lina, supongo que no pude evitarlo xD
kaizoku ou-
Mensajes : 179
Fecha de inscripción : 07/03/2011
Edad : 40
Localización : En un dojo, puliendo mi Kyokugen karate
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Lina no llega a ser jamás una Mary Sue, así que no te preocupes. Además, creo que es un buen personaje, porque mezcla muy bien las personalidades de Luffy y Nami sin ser una copia de ellos. No sé si me explico.
Y sí, la verdad es que se nota demasiado tu avance de escritura. El contraste entre los primeros capítulos y los últimos es grande. Y eso reafirma mi opinión de que solo escribiendo y escribiendo es como se mejora xD
Lástima que esté llegando a su fin, aunque te ha salido bien largo ^^
¿Tienes pensada alguna otra historia de Luffy y Nami? Que lo mejor que tienes son los dialogos y el sentido del humor, algo muy difícil de lograr.
Y sí, la verdad es que se nota demasiado tu avance de escritura. El contraste entre los primeros capítulos y los últimos es grande. Y eso reafirma mi opinión de que solo escribiendo y escribiendo es como se mejora xD
Lástima que esté llegando a su fin, aunque te ha salido bien largo ^^
¿Tienes pensada alguna otra historia de Luffy y Nami? Que lo mejor que tienes son los dialogos y el sentido del humor, algo muy difícil de lograr.
Llaelien- Mensajes : 14
Fecha de inscripción : 18/01/2012
Re: [Fanfic]¡Mi nombre es Lina-chan - Capítulos 46/?? (En proceso)
Tengo pensadas un par de cosillas por ahí, una relacionada con este fic de Lina-chan, y otra sin ninguna relación. Espero cristalizarlas pronto.
kaizoku ou-
Mensajes : 179
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